Una comparación de huellas dentales confirmó que los restos humanos descubiertos en la reserva son de Brian Laundrie, indicó el FBI en un comunicado
Los restos humanos encontrados el miércoles en una reserva natural de Florida son del Brian Laundrie, novio de Gabby Petito, la joven asesinada hace unas semanas en Estados Unidos, anunció este jueves la policía federal.
Una comparación de huellas dentales confirmó que los restos humanos descubiertos en la reserva son de Brian Laundrie, indicó el FBI en un comunicado. El joven desapareció tras regresar sin Petito de un viaje que habían emprendido juntos por el país.
Los agentes también hallaron un cuaderno y una mochila pertenecientes a Brian Laudrie, el novio de Petito, añadió la misma fuente.
Estos artículos aparecieron en un área que hasta hace poco había estado bajo el agua, explicó el agente del FBI Michael McPherson.
Equipos forenses están examinando la zona del hallazgo, en la reserva natural Carlton, donde pasarán probablemente varios días, añadió.
Laundrie y Petito salieron de Nueva York en julio para recorrer el oeste de Estados Unidos en una camioneta durante cuatro meses. Pero, el 1 de septiembre, el chico volvió solo a su domicilio de North Port, donde la pareja vivía con la familia Laundrie.
La desaparición de Petito atrajo una enorme atención mediática en el país, avivada por el hallazgo de su cadáver en Wyoming, el 19 de septiembre, y el anuncio de que murió estrangulada.
Poco después de su regreso a Florida, Laundrie, de 23 años, desapareció tras negarse a responder a las preguntas de la policía.
Sus padres y la policía se habían reunido este miércoles por la mañana para intentar localizar al joven en la reserva Carlton.
El caso de Petito empezó a causar revuelo en internet cuando su familia señaló su desaparición el 11 de septiembre y aseguró que no la habían visto desde finales de agosto.
Un vídeo publicado por la policía de Moab, una pequeña ciudad de Utah, aumentó las sospechas en torno a Laundrie.
En las imágenes, Petito, de 22 años, aparece llorando en un coche, después de que la policía interviniera el 12 de agosto por una disputa doméstica.
La historia de esta joven rubia estadounidense es tristemente común en un país donde cientos de miles de personas desaparecen cada año.
